Plegó en as mans mías un numer d'a revista Atalaya, publicada por los Testigos de Jehová, unatra relichión alacetada en a Biblia. O catolicismo, por razons de marketing, s'avergüenya y gosa amagar (a lo menos en l'Estau espanyol) asoben d'o viello testamento y no fa guaire publicidat d'ixe viello Dios vengativo, carranyoso y ronyan que i amaneix (encara que ye o mesmo Dios que en o nuevo). Manimenos os testis y muitos atros camals d'o cristianamen sí que s'amuestran argüellosos d'ixa falordieta d'odio, venganzas y asesinatos masivos que ye a Biblia. He trigau un par de trozos d'a revista. Me'n ridié muito en primeras por o fumau que cal estar ta escribir istas cosas, pero dimpués aturas un poquet, y paras cuenta de que bi ha chent que, os alazetz d'a suya traza de vivir y pensar son istos, y pretas a tremolar de camin. Y no me soi referindo nomás que a os testigos. A Biblia ye si fa u no fa a mesma ta todas. Cananeos incluyius.
Amprau de La Atalaya anunciando el Reino de Jehová. 1 de Enero de 2010
Sobre a fin d'o mundo.
Una supuesta "fecha de caducidad"
La Biblia, que está inspirada por Dios, afrima: "Una generación va y otra viene, más la Tierra permanece para siempre" (Eclesiastés 1:4, La Biblia de las Américas). En efecto, como Jehová Dios "ha fundado la tierra sobre sus lugares establecidos", esta existencia para siempre (Salmo 104:5). ¿Le cuesta creerlo? En ese caso, veamos por qué podemos estar seguros de que los científicos que predicen el fin del planeta están equivocados.
Pongamos un ejemplo. Muchos de los artículos que se venden en las tiendas llevan una etiqueta con una fecha de caducidad o vencimiento, ¿verdad? Pero ¿quién pone esa fecha? ¿El gerente, porque tiene mucha experiencia vendiendo el producto? Es obvio que no. Solo puede hacerlo quien mejor lo conoce: el fabricante. Y por eso confiamos en que la fecha indicada es la correcta. Pues bien, Dios declara en la Biblia que ha "fijado sólidamente la tierra" para que nunca desaparezca (Salmo 119:90). Y puesto que él es su "fabricante", tenemos razones más que suficientes para confiar en que el planeta no tiene "fecha de caducidad".
Pero tal vez se pregunte: "¿Y no podría ser que los seres humanos causemos daños irreversibles al planeta?". No, eso nunca ocurrirá. A diferencia de los fabricantes humanos, Jehová es todopoderoso y puede ofrecernos una "garantía total" (Job 42:2). "mi palabra [...] tendrá éxito seguro", afirma de forma contundente (Isaías 55:11). Así pues, nada impedirá que el Creador cumpla su voluntad en la Tierra (Salmo 95:6). Ahora bien, ¿cuál es esa voluntad, o propósito, y cómo hará que se lleve a cabo?
Sobre l'acotolamiento d'os cananeos
4.- ¿Puede ser Jehová un Dios de amor y al mismo tiempo aniquilar una nación? A primera vista pudiera parecer que no (1 Juan 4:8). Sin embargo, si se analiza más de cerca la situación uno se da cuenta de lo amoroso que fue Dios.
Hacía mucho tiempo que Dios veía que los cananeos iban por mal camino. Pero en vez de exterminarlos de inmediato, esperó pacientemente durante cuatrocientos años hasta que su maldad hubiera "quedado completa" (Génesis 15:16)
En otras palabras, Jehová los destruyó cuando alcanzaron el colmo de la maldad y no había posibilidad de que cambiaran. Aún así, no exterminó indiscriminadamente a todos lo cananeos. ¿Por qué? Porque no todos eran incorregibles. Él les perdonó la vida a quienes estuvieron dispuestos a cambiar como Rahab y los gabaonitas (Josué 9:3-11, 16-27; Hebreos 11:31)